jueves, 12 de marzo de 2009

Oscuros, Todos Oscuros

Caminos, cortos, trayectos,
trotes, calles
todas oscuras.
asi son todas.
todas oscuras.
no camina nadie.
todos andan escondidos
cuando las calles son
todas oscuras.

me puse tan colerico!!
iracundo!!, angel negro!!
que me fui a caminar
y todo me dio lo mismo.
no me importaba ese mensaje
que me decían en el colegio
no me importó la recomendación
de los pacos, que me cuidaban
porque yo no era cogotero,
no me importó don graf y sus
gueás de avisos

ya sabía que las calles
de noche son
todas oscuras.

me metí en gregorio mira a las 5 30.
careraja toqué un timbre.
no me abrió nadie,
aunque vi al sapo mirandome
por la ventana del segundo piso.
a él no le importaba pasar piola,
no era para esconderse
que no prendió la luz.
todos sabemos y ayudamos
a mantener las calles
todas oscuras.

me pararon como tres colectivos
en centenario.
y yo no hice parar ninguno.
era el único que iba caminando
y no sabía mi camino.
pedro montt me daba más susto
asi que caminé hacia allá
y era más oscuro. y me dio más susto.
y toqué otro timbre y tampoco me abrieron.
y llegué a la escalera pal cerro.
la mitica escalera por el rio de janeiro.
la que nunca había caminado.
la que toda la vida había mirado de reojo
oscura. en cada escalinata
todas oscuras

fue como darme un gusto de cabro chico
caminar peldaño a peldaño
jugando y dando pequeños saltos
porque son escalones bien separados.
me entretuve ahí
donde se compran culos y se venden
chupones.
donde cogotean a las 9 de la noche
pero no a las 6 de la mañana.
me senté.
me fumé un cigarro mirando pedro montt
desde la escalera.
al reves. era como mirar de cabeza.
nunca me había sentado a mirar.
y no pasó nadie. no pude ver a nadie caminando
estaban todos dormidos.
todos oscuros.

seguí caminando, ya me iba pa la casa.
no había nada más que hacer,
la locura se me estaba pasando
tenía sueño.
no había nadie con quien compartir,
ni pelear.
ahora no pasaban los tres colectivos
que me paraban solos en centenario.
llegué hasta barros luco.
nada.

me tuve que ir caminando, mirando el paseo
el mar estaba llorando ahí en las rocas.
enojadisimo estaba.
alguien le debe haber hecho algo.
yo no sé ver esas cosas.
pero me dió esa impresión.
los perros estaban durmiendo.
"por fin algún ser vivo pa conversar"
no me pescaron, ni un ladrido.
ni una persecusión odiosa,
ni una choriá de perro choro.

una joya de noche.
oscura...
en cada paso.
en cada cigarro.
en cada timbre
en cada calle
en cada peldaño
en cada estrella y ola.
en cada perro piola
en cada uno...
todos oscuros

2 comentarios:

  1. podría hacerte compañía una noche porque yo soy muy oscura

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  2. jajaja , que buen paseito que te diste (ya sea imaginario o real). Menos mal la oscuridad (imaginaria o real) no te dieron miedo ni te hicieron daño.
    Me gustó el relato.

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